En un auditorio copado de trabajadores del Gobierno Regional de Cusco (GRC) y algunas organizaciones sociales, el gobernador regional Edwin Licona rindió cuentas sobre los logros, avances y prioridades de su tercer año de gobierno.
Como ha ocurrido en los dos años anteriores, Licona evitó la autocrítica. Se le cuestiona la demora y conclusión de obras emblemáticas.
Licona no pudo retomar las obras del hospital Antonio Lorena que fue paralizado en marzo de 2015, tras la resolución del contrato a la empresa brasileña OAS, por incumplimiento del contrato.
Tampoco logró iniciar la construcción de la Vía Expresa que busca resolver el problema de transporte en la Ciudad Imperial.
El dirigente de la Vía Expresa, Santiago Gayoso, reclamó al presidente que decida si anulará el crédito de 357 millones para construir la vía o proseguirá con el proyecto. Licona respondió que la obra sigue en marcha.
Igualmente está pendiente una decena de colegios abandonados por Antalsis y otras empresas en la Región Imperial.
Su presentación recibió críticas. El alcalde de Ccorca, David Quispe, cuestionó que la audiencia se haya realizado ayer, cuando la ciudadanía estaba más preocupada en el debate por la vacancia del presidente Pedro Pablo Kuczynski. Se mostró insatisfecho con la exposición del gobernador cusqueño.
De igual forma, el consejero Alaín Alanoca lamentó que "no se haya hecho una evaluación real de la gestión y no se haya observado el impacto que ha tenido la inversión del GR". "Pareciera que se ha hecho la rendición de cuentas sólo para cumplir con lo que establece la normatividad y no por un ánimo de transparentar la gestión", apuntó.
La Audiencia Pública Regional de Rendición de Cuentas 2017 se desarrolló en el auditorio del Paraninfo de la Universidad Nacional de San Antonio Abad del Cusco (Unsaac). Su exposición -incluido la intervención de ciudadanos- tomó casi siete horas y se centró principalmente en explicar el Plan Estratégico de Desarrollo Regional Concertado Cusco al 2021, con prospectiva al 2030.
LAS METAS AL 2021 Y 2030
El gobernador Edwin Licona Licona aseguró que el presupuesto de estos tres años fue destinado para mejorar la situación en algunos sectores fundamentales como educación, salud, saneamiento básico, combate a la corrupción, mejoramiento de la competitividad, entre otros.
Licona reiteró que la gestión camina hacia el logro de las metas trazadas en el plan de desarrollo.
Entre otras cosas dijo que el dinero regional es usado para reducir la pobreza de 18.8% a 8.8% en 2030, mejorar la comprensión lectora de 48.8% a 87%, y la capacidad de solución de operaciones matemáticas de 27.7% a 65.7%. Para mejorar este sector se han construido y mejorado casi cien instituciones educativas en el interior de la región.
Igualmente precisó que se debe reducir la desnutrición crónica de 16.7% a 6%, que la mortalidad materna baje de 95 muertes anuales a 72 en el 2030, y que la percepción de la corrupción baje de 42% a 25% en ese mismo periodo.
Otras prioridades son mejorar la competitividad, priorizando los sectores agropecuario, manufactura, turismo y tecnología e innovación, y construir más carreteras para cohesionar la Región Imperial.
Fuente La Republica.